Talleres no pudo quedarse con más que un empate 1 – 1 frente a Cambaceres, en cancha de Liniers, que le sirve de poco para sus pretensiones deportivas en esta temporada, pero dio un paso adelante, en relación a sus últimos compromisos: Mostró entrega, actitud y ganas para jugar el partido; no perdió; dejó atrás seis derrotas consecutivas; y con el gol de Bordón, se terminó la sequía 637 minutos sin anotar un tanto.
Foto Mono Gómez. Diego Bordón remató esa pelota, que tendrá destino de gol. Pudo desahogo.