Talleres terminó igualando 1 – 1 ante Villa San Carlos, en la tarde del Sábado, en Berisso, y se lamenta por no haber podido quedarse con la victoria y los tres puntos en el Estadio Genacio Sálice, cuanto tuvo estuvo todo dado para poder lograrlo. El elenco de Fabián Lisa era superior al rival, y logró abrir el tanteador a los veintiún minutos de la parte inicial, con un golazo de Lucas Farías. Además, en esa primera parte, generó varias situaciones, que no concretó. No obstante, en el segundo tiempo, los dirigidos por Miguel Ángel Restelli, buscaron el empate con más ímpetu en ataque, pero con escaza efectividad; y el Albirrojo, volvió a desperdiciar las pocas oportunidades que tuvo frente al arco de Neyder Aragón Carmona. Pero los de Escalada, no supieron aguantar el resultado y tras un rebote, Matías Fernández concretó el empate, a los cuarenta y dos minutos. Ya en tiempo de descuento, cuando parecía que aún no estaba sellado el resultado, Marco Lambert habilitó en el área chica a Matías Sosa, para que convierta el gol del triunfo y el mediocampista, increíblemente rifó la oportunidad con un disparo por encima del travesaño. Se lamenta el Tallarín, por haber dejado pasar la oportunidad de achicar distancia con el líder Ituzaingó, que le sacó seis puntos de ventaja, en una carrera en la que al conjunto de Remedios de Escalada le quedan doce puntos por transitar.

Foto Inés Martín. Talleres, se lamenta por no haber podido cerrar el partido, cuando estaba en ventaja.

Un empate, resignando dos puntos. Una igualdad, que deja nada más que una unidad, cuando pudo haberse traídos dos más. El que perdona en el fútbol, lo paga caro. Y eso, le sucedió a Talleres, una vez más.

Después de haber convertido un tanto y dilapidado media docena de situaciones de gol, no siendo efectivo para estirar la cuenta en el marcador, cuando tuvo muchas para lograrlo, se lamentó. San Carlos, igualó el partido a pocos minutos del final, por inercia y practicidad. Y para colmo, aún cuando ya pesaba sobre los de Escalada, el reciente gol convertido por el rival, Matías Sosa tuvo una de las chances más claras de gol de la temporada, y la tiró por encima del travesaño. Difícil de digerir este empate.

Villa San Carlos y Talleres, protagonizaron un partidazo, en la tarde del Sábado, en Berisso. El juego, tuvo un ritmo frenético y la pelota, rodó al compás del campo de juego, para darle una dinámica de esas que no abunda en la categoría.

Desde el comienzo del duelo, Talleres impuso su planificación de ataque. Consiguió ser el dominador.

A los tres minutos, inició Patricio Romero, una jugada por la derecha en ataque, que derivó en el remate débil de Luciano Arcuri a las manos de Neyder Aragón Carmona.

En ese arranque de partido, a los cinco minutos, Marco Lambert trepó por el otro carril. Envió un centro, que cabeceó mal Franco Pulicastro. La bola se perdió muy por encima del travesaño.

El partido, era entretenido; de ida y vuelta. Talleres, mostraba algunas flaquezas en el sector defensivo. Y Villa San Carlos, apretaba para aprovechar los posibles errores de la visita.

Se jugaban dieciséis minutos, cuando llegó un lindo centro de Fernando Enrique, que se acomodó y de media vuelta, envió la pelota al área. En ese lugar, Franco Pulicastro conectó de cabeza. Sin embargo, el arquero se quedó con ella, entre sus manos.

Un minuto más tarde, Franco Pulicastro aguantó la marca en la mitad de la cancha de Federico Slezack, y habilitó con uno magnífico pase a Alejandro Aranda, quien quedó frente al arquero. El delantero santiagueño, superó en la carrera a los dos defensores que lo perseguían, y terminó rematando fuerte arriba, sin eficacia. La pelota, pegó en el travesaño y se salvó la Villa.

La búsqueda del Tallarín no cesaba. Tenía campo abierto y huecos en ataque, para aprovechar en un campo de dimensiones amplias, que se prestaba para jugar bien al fútbol. Tocaba una y otra vez. Complicaba muchísimo, desde la mitad de la cancha hacia adelante.

Marcaba el minuto veinte el cronómetro, cuando los de Escalada, tuvieron otra más. Esta vez, Marco Lambert puso un pase para Franco Pulicastro, y el delantero quedó frente al arco. Su disparo, salió cruzado y pasó a centímetros del palo derecho de Neyder Aragón Carmona. Daba la impresión, que estaba al caer el primero de la visita.

En ese continuado que estaba desarrollando la ofensiva Albirroja, logró quebrar el marcador. La secuencia de toques rápidos, comenzó en campo propio, desde una recuperación de Nicolás Malacio. Luciano Arcuri, metió un pase estratégico al vacio para Fernando Enrique. Y éste, penetró por el sector izquierdo, hasta la puerta del área. Allí, propulsó un pase rasante en línea horizontal, que Ignacio Oroná alcanzó a pellizcar. Pero el recorrido de la bocha no se detuvo. Y Lucas Farías, ingresando por el vértice derecho del área chica, le rompió el arco a Neyder Aragón Carmona para colocarla en el ángulo y cantar el primero. Talleres ganaba 1 – 0 en veintiún minutos, y era una consecuencia lógica de lo que sucedía en la cancha.

Después de ese vendaval que sufrió en ataque, y con el resultado en desventaja, San Carlos mostró expresiones de reacción.  

A los veintinueve minutos, el equipo de Miguel Ángel Restelli tuvo un tiro de esquina, en los pies de Maximiliano Badell. Ignacio Oroná ganó en la altura y cabeceó, y el esférico terminó saliendo apenas al lado del palo izquierdo de Mauro Casoli.

Talleres no se conformaba con la ventaja, y buscaba algo más. En treinta minutos, una buena combinación con pared entre Fernando Enrique y Lucas Farías, culminó con un remate del mediocampista que se fue desviado muy cerca del travesaño.

El curso del partido, tenía lugar para jugadas impredecibles. Tal fue el caso del remate de Lucas Licht, desde cuarenta metros, que terminó impactó en el parante superior del arco de Mauro Casoli, a los treinta y dos minutos, para encender las alarmas en el elenco de Fabián Lisa.

San Carlos tenía algo más de presencia en ofensiva, en comparación de los primeros veinticinco minutos de juego. Por eso, a los treinta y nueve, Alexis Alegre logró superar la marca de Fernando Enrique, y sacó un disparo desde afuera del área, que Mauro Casoli alcanzó a manotear contra su palo diestro y desviar al tiro de esquina.

Mientras, el Tallarín tuvo un par de situaciones más, antes que se bajara el telón del primer acto. En cuarenta y un minutos, Franco Pulicastro tuvo una más de cabeza, tras un tiro de esquina ejecutado por Fernando Enirque, y las manos del arquero sirvieron para contener, en dos tiempos.

La última del primer tiempo, también sería muy nítida y desaprovechada. Ya en cuarenta y cinco minutos, Nicolás Malvacio se proyectó hasta entrada la mitad del campo, y envió un pelotazo para Franco Pulicastro. Y el centroatacante, ganó a espaldas de su marcador Luciano Machín, aunque volvió a carecer de efectividad en la definición. Su remate, se perdió por encima del ángulo derecho del arquero.

El arranque del complemento, mostró otra actitud por parte de los de Berisso. Se adelantaron unos metros más en el terreno y buscaron ganar a espaldas del mediocampo rival, para generar alguna maniobra de peligro.

El Tallarín, esperaba paciente, algún desacople del elenco Villero en sector defensivo, para volver a tener una situación de gol. Y así, sucedió. En cinco minutos, Alejandro Aranda presionó a Federico Slezack en la salida y se quedó con la pelota, para escaparse mano a mano frente a Neyder Aragón Carmona. Pero tiró largo su auto pase, se quedó en velocidad y permitió que el arquero llegue a dar respuesta firme.

Los de Berisso, buscaron un poco más en ataque, luego de los primeros diez minutos del segundo tiempo, con la impronta que le dieron los ingresados Matías Fernández y Matías Samaniego.

Allá por los dieciséis, apareció en acción Matías Fernández, por el sector derecho del área grande de Talleres, a espaldas de Marco Lambert y proyectó un remate fuerte, que terminó despejando Luciano Arcuri, cerca de la línea de sentencia.   

En veinte minutos, la Villa volvería a tener otra acción muy nítida. Matías Fernández metió un pelotazo en profundidad, hacia el sector izquierdo de su ataque, por donde se filtró Matías Samaniego a espaldas de Patricio Romero. Ya dentro del área y en la definición, Mauro Casoli dio una estupenda respuesta abajo, para atenazar y brindar seguridad en el marcador.

Los de Remedios de Escalada, especulaban con el paso de los minutos, y apostaban a un contragolpe certero, que permitiese definir la historia. Fabián Monserrat ingresó por Alejandro Aranda, para dar mayor contención en la mitad de la cancha. Y unos minutos más tarde, utilizando esa estrategia, Patricio Romero envió un centro que Lucas Farías cabeceó muy débil, a las manos del portero.

El último cuarto de hora, se jugaba con mucha energía e imprecisiones. San Carlos, no se resignaba y deseaba el empate. Arriesgaba también en función de ellos, aunque pudiese ser letal cederle espacios a su oponente.

Y a partir de sus ganas y tenacidad para ir a buscarlo, el de Berisso, encontró el empate a tres minutos del final, aprovechado la inmadurez del Albirrojo, que no supo definirlo ni blindarse en defensa. El reloj marcaba el fatídico minuto cuarenta y dos, cuando Matías Fernández jugó en la mitad de la cancha con Alejandro Lugones. El ex jugador de Talleres, por la derecha, pegado a la línea de costado, disparó un centro para Pablo Miranda, que fue a buscar a la altura del punto del penal. Cristian Godoy alcanzó apenas, a rechazar la pelota. Pero la misma, le quedó de lleno al mismísimo Matías Fernández, que con mucha astucia cruzó el disparo al palo derecho de Mauro Casoli, para convertir el empate. Como premio por no haberse resignado, San Carlos pudo hacer valar aquel proverbio que indica que “los goles que se erran en un arco… se sufren en el otro”. El partido, estaba 1 – 1.

Todo parecía ser desazón para Talleres. Se le estaba escapando sobre el final, algo que debió haber consolidado mucho antes. No obstante, habría tiempo para alguna más. Una, para volver a desaprovechar, y lamentarse toda la semana.

El partido entró en el primer minuto adicionado por Mauro Biasutto, y el Tallarín armó una jugada de Baby Fútbol, para recuperar el resultado victorioso. Seis jugadores de San Carlos defendían en línea en la puerta del área, y Matías Sosa abanicó la pelota desde el costado derecho de la ofensiva. Descargó en la puerta del área con Diego Guzmán. Y el juvenil puso un exquisito pase para Marco Lambert, que penetró por sorpresa, a la altura del cuadro menor. El lateral izquierdo, recibió y con una lectura impecable, habilitó a Matías Sosa, para que convierta solo frente al arco. Era para empujarla y celebrar. Inexplicablemente, el mediocampista que definió con el empeine de su pie derecho, eyectó un remate que salió volando muy por encima del travesaño. El Albirrojo dilapidó la victoria así.

Eso no fue todo. Porque sobre el final, hasta pudo haberlo perdido. En una última jugada, a los cuarenta y ocho y fracción, el árbitro Mauro Biasutto terminó por anular un gol de Pablo Miranda, quien estaba adelantado nada más que por unos centímetros sobre la posición de Cristian Godoy.

El partido terminó, y Talleres lamentó los dos puntos dilapidados en Berisso. Sobre todo, teniendo en cuanta que sufrió un empate, como producto de su impericia, para coronar algunas de las tantas situaciones que el mismo equipo generó. En un duelo en el que pudo haberle sacado brillo al marcador, se fue nada más que con un punto.

Una igualdad, que además lo alejó muchísimo de la pelea por lo más alto, en una fecha en la que se dieron algunos resultados, para acercarse al puntero, Ituzaingó. El elenco comandado por Fabián Lisa, quedó a seis puntos del líder, cuando solo tiene doce por jugar.

SISTESIS:

VILLA SAN CARLOS 1

Neyder Aragón Carmona; Juan Ignacio Saborido (55’ Matías Fernández), Federico Slezack, Luciano Machín y Nahuel Figueredo; Alexis Alegre, Ignacio Oroná, Lucas Licht (92’ Gonzalo Raverta) y Maximiliano Badell (55’ Matías Samaniego); Rodrigo Cao (74’ Pablo Miranda) y Alejandro Lugones.

Suplentes: Lautaro Banegas, Agustín Russo y Emanuel Sosa.  

DT: Miguel Ángel Restelli.

TALLERES 1

Mauro Casoli; Patricio Romero, Cristián Godoy, Nicolás Malvacio y Marco Lambert; Sebastián Gallardo; Luciano Arcuri y Fernando Enrique (83’ Matías Sosa); Alejandro Aranda (66’ Fabián Monserrat), Franco Pulicastro y Lucas Farías (83’ Diogo Guzmán) .

Suplentes: Nicolás Rodríguez, Nicolás Monserrat, Luis Monge y Matías Bolaña.  

DT: Fabián Lisa.

Goles: 21' Lucas Farias (T) y 87' Matías Fernández (VSC).

Amonestados: Lucas Licht (VSC); Franco Pulicastro y Matías Sosa (T).

Estadio: Villa San Carlos (Bien).

Árbitro: Mauro Biasutto (Bien).

Asistentes: Diego Romero y Nahuel Santanocito.

Cuarto Árbitro: Lucas Ozuna.

Recaudación: No fue suministrada.

Público: 350 personas aproximadamente.