Inesperada derrota y goleada sufrida por Talleres, en el debut, en Ezeiza. Tristán Suárez lo vapuleó 4 - 1, con goles marcados por Braian Miranda, en dos ocasiones, Franco Quiroga y Ezequiel Melillo, mientras que Jonatan Soria descontó transitoriamente para el Albirrojo, cuando el rival estaba tres goles arriba en el marcador. El resultado, fue exagerado dado el desarrollo del partido, ya que Talleres tuvo una aceptable producción con la pelota, desperdició chances netas de gol en la primera etapa, y mereció algo más. Sin embargo, en el aspecto defensivo fue muy liviano, y terminó siendo superado ampliamente por el rival, qué contó con una gran simpleza y eficacia para convertir las situaciones producidas en ataque. Esto recién empieza, pero hay mucho por corregir y aceitar de cara a lo que se viene, dado que sólo con las intenciones y la propuesta ofensiva, no alcanza para pelear en este duro Torneo Apertura de la Primera B Metropolitana.
Increiblemente, esta jugado pudo haber cambiado el destino de la tarde, para Talleres. Y no fue gol.
Talleres y una nueva derrota. El sufrimiento, ese padecido tantas veces en el torneo pasado, parece que no quiere cesar y busca seguir sacudiendo a los de Escalada. Pese a que todo se renovó para esta temporada, en lo que hace al fútbol profesional del Tallarín, el primer resultado fue adverso. De antemano, se preveía que el encuentro ante Tristán Suárez, en Ezeiza, sería difícil, frente a un equipo que también incorporó dieciocho jugadores. Pero la realidad, es que ni el menos optimista, se esperaba una derrota de tal calibre en el marcador. Aunque lo cierto es que, el conjunto Albirrojo, mereció quedarse con algo mejor, dado que contó con situaciones clarísimas a lo largo del encuentro. Pero los goles no se merecen, se hacen…
Durante el primer tiempo, Talleres tomó las riendas del partido, sobre todo en la primera sección, de estos cuarenta y cinco minutos. La primera chance, llegó a los diez minutos, a través de un tiro libre ejecutado de gran manera por Leandro Martínez, pero se encontró con una sólida respuesta del arquero Rodrigo Lugo, quien fue uno de los baluartes del conjunto local en este partido.
Sin embargo, Suárez intentó acercarse al arco de Ezequiel Cacace, con más empuje que fútbol. Y en una acción aislada, Marcos Brítez Ojeda estrelló un remate en el travesaño, casi llegando a los diecisiete minutos de esta etapa.
Talleres dominaba el balón, con la intención de triangular, y metiéndole mucho ritmo al juego. Buscar los espacios y sobre todo, producir un buen futbol. Pero el Lechero, no se quedaba atrás, y con sus armas, lo lastimaba al visitante que defensivamente dejó muchísimas dudas, y evidenció rasgos de un equipo que aún está en etapa de formación y conocimiento. Por eso mismo, desde el minuto cero, el partido fue electrizante y con un ritmo frenético, que entusiasmó a los presentes en el Estadio 20 de Octubre.
A los veintidós minutos, llegó la jugada más clara de gol para el Tallarín, que no fue gol de milagro (y con fortuna para los Lecheros). Luego de un tiro de esquina bien ejecutado por Leandro Martínez y un remate de Cristian Godoy que tapó magníficamente Rodrigo Lugo, Francisco Martínez apenas despejó, y la pelota quedó bollando en el área chica. Solo hacía falta empujarla, pero falló en el intento Luciano Vargas, e inexplicablemente el mismo lateral izquierdo Francisco Martínez desde el piso, interpuso el pie por encima de Maximiliano Badell, sobre la línea de gol, para evitar que la pelota ingrese al arco. De manera increíble, Talleres seguía sin marcar un gol en el encuentro.
Paradójicamente, luego de esta acción y cuando Talleres era más, se produjo un contraataque letal que terminó en el primer tanto del partido para el conjunto de Aníbal Biggeri. Un error defensivo y pérdida del balón en defensa de Maximiliano Serrano, en la puerta del área, permitió que Fernando Giménez el gane la pelota con el cuerpo, proyecte un centro con rebote, y Braian Miranda agarre la pelota adentro del área. El atacante, eludió a la defensa rival y remato al palo izquierdo de Ezequiel Cacace. A esa altura, el resultado era injusto, pero Tristán Suárez pasaba al frente en el marcador 1 – 0.
El Albirrojo, siguió con la misma postura de intentar y atacar, tal vez sin claridad pero siendo superior desde lo que era la posesión de la pelota. Sobre el cierre de la primera etapa, Gabriel Seijas erró lo que hubiese sido el empate Tallarín. Gran centro de Maximiliano Badell y el mediocampista, ex Atlanta, llegó solo por el sector derecho y definió defectuosamente, a los cuarenta minutos.
En el complemento, Talleres ingresó muy dormido; fue pasivo a la hora de estar atento a la primera jugada en contra clave del segundo tiempo, y lo pagó carísimo. A los siete minutos, luego de un tiro de esquina, en jugada preparada, apareció en la puerta del área Franco Quiroga completamente solo. La clavó en un ángulo y dejó sin reacción al Tallarín. Tristán Suárez lo ganaba 2 – 0, y era un premio a su alto poder de definición.
Como si fuese poco, cinco minutos después de esta acción, Braian Miranda eludió a la defensa, y remató al arco, pero la pelota rebotó en la cintura de Luciano Vargas y este rebote desorientó a Ezequiel Cacace. Sutilmente, el balón se metió dentro del arco, con una extraña parábola. De manera increíble, a los doce minutos de la segunda parte, Talleres lo pasaba a perder 3 – 0, y el resultado era demasiado exagerado.
Inmediatamente, Adrián Czornomaz ejecutó el primer cambio, para intentar una reacción del equipo. Con el ingreso de Jonatan Soria por Adrián Maidana, el mediocampo tuvo otra sintonía y frescura. Incluso el ex Comunicaciones, fue el encargado de descontar rápidamente y tratar de dejar con vida al Albirrojo en el partido. Tras una buena combinación de ataque, la pelota llegó a la zona de más vulnerabilidad del rival; aguantó en la puerta del área chica Alejandro Aranda, y Jonatan Soria remató y convirtió el gol, a los diecisiete minutos.
El encuentro, luego del gol de Jonatan Soria, estuvo parado siete minutos, debido a una lesión del portero Rodrigo Lugo en su pierna derecha, quien luego que se reanudaran las acciones del juego, finalmente tuvo que salir del campo de juego. En su lugar, ingresó Cristian Correa, de muy buen rendimiento en esos minutos disputados, que también fue clave para sostener el triunfo local holgado.
El tramo restante del cotejo, fue controlado efectivamente por el equipo local. Talleres siempre con la pelota, pero más desordenado que en la primera parte, sin tanta profundidad ni claridad por el bloqueo defensivo que propuso el rival, que se aprovechó de la desesperación del Tallarín y en varios contraataques, tuvo antes la posibilidad de liquidar el partido definitivamente.
Sobre el cierre del partido, a los seis minutos de los diez que agregó el árbitro del encuentro, Sebastián Bresba, Ezequiel Melillo quedó mano a mano con Ezequiel Cacace y definió suave hacia un costado, poniendo así las cifras definitivas del marcador. A los cincuenta y seis, Tristán Suárez lo goleaba 4 – 1 al elenco de Escalada.
Talleres mostró una cara muy distinta desde lo ofensivo, con mucha movilidad y ataques muy directos, y un ritmo frenético. Careció de efectividad. Y en los aspectos defensivos, debe mejorar muchísimo, en su coordinación y sincronización, si pretende pelear arriba entre los mejores de la categoría. La primera prueba, le dejó una marca importante que deberá tomarla y analizar, para corregir sus debilidades y empezar a sumar unidades.
SÍNTESIS:
TRISTÁN SUÁREZ 4
Rodrigo Lugo (72' Cristian Correa); Mariano Bettini, Gabriel Tomassini, Bruno Duarte y Francisco Martínez; Franco Quiroga, Federico Guerra, Marcos Brítez Ojeda y Claudio Galeano (86' Enzo Arreguín); Braian Miranda (80' Ezequiel Melillo) y Fernando Giménez.
Suplentes: Juan Cruz Huichulef, Nicolás Barrientos, Maximiliano Brambillo y Fabián Garay.
DT: Aníbal Biggeri.
TALLERES 1
Ezequiel Cacace; Maximiliano Serrano, Cristian Godoy, Luciano Vargas y Patricio Romero (77' Luciano Arcuri); Gabriel Seijas, Adrián Maidana (54' Jonatan Soria) y Juan Manuel Trejo; Leandro Martínez (63' Ángel Prudencio), Alejandro Aranda y Maximiliano Badell.
Suplentes: Mauro Casoli, Nicolás Sainz, Ramiro Echeverría y Nicolás Ricci.
DT: Adrián Czornomaz.
Goles: 23' y 57’ Braian Miranda y 52' Franco Quiroga (TS); 62' Jonatan Soria (T) y 96' Ezequiel Melillo (TS).
Amonestados: Braian Miranda y Bruno Duarte (TS).
Estadio: Tristán Suárez (Mala).
Árbitro: Sebastián Bresba (Mal).
Asistentes: Guillermo Santillán y Pablo Acevedo.
Cuarto Árbitro: Sebastián Habib.
Recaudación: No fue suministrada.
Público: 1.000 personas aproximadamente.
En la primera etapa, el Tallarín chocó contra la seguridad del arquero Rodrigo Lugo.
En el complemento, el arquero ingresado Cristian Correa, también le negó el gol a Talleres.