Talleres igualó 0 – 0 ante Racing (Córdoba), en una partido durísimo y chato, que tuvo que disputar todo el segundo tiempo con uno menos, por la expulsión de Fernando Duré al minuto del complemento, frente a un discreto oponente, que no pudo hacer valer el hombre de más, en el Estadio Pablo Comelli, en la tarde del Martes, por la 14º fecha de la Zona A del Torneo 2024 de la Primera Nacional. El Árbitro Marcos Recalde, lo condicionó al mostrarle la tarjeta roja a Fernando Duré, cuando no ameritaba semejante sanción, y omitió cobrar un penal en una mano de Facundo Rivero, en treinta y cuatro de la segunda parte. El Albirrojo, sintió el impacto del desgaste físico realizado durante la presentación ante Racing Club de Avellaneda, el Jueves por la Copa Argentina, y no mostró la misma intensidad y despliegue que acostumbra a entregar. Generó escasas situaciones, en el arco contrario, y Damián Tello fue determinante con tres atajadas claves, para aguantar el empate. Terminó sumando un punto, frente a un rival que también persigue el objetivo de permanecer en la Categoría, y sigue entre los últimos cinco de esta zona.

Foto Prensa Talleres. El Albirrojo, igualó sin goles, ante un Racing (C) que lo pudo haber ganado.

El punto, siempre sirve, para Talleres en la Primera Nacional. Si bien, lo ideal era vencer a este Racing (Córdoba), que a esta altura de la Temporada y luego de lo que fue su complicado arranque, parece ser un competidor directo necesidades y aspiraciones, la unidad no está mal, en el contexto de un trámite fue desfavorable para los locales. Jugando con un hombre menos, toda una etapa completa, con la carga física y emotiva, de lo que fue la victoria ante el Racing Club de Avellaneda, el último Jueves, el elenco de Martín Rolón, sumó uno; y no perdió. El empate 0 – 0 ante la Academia Cordobesa, también reflejó el escaso vuelo futbolístico, que se vio en la tarde del Martes, en Remedios de Escalada.

De arranque, Racing (Córdoba) sorprendió, adueñándose de la pelota y generando situaciones de peligro. Fue así, cuando apenas se jugaban treinta y cinco segundos, inquietó tempranamente. De un lateral desde el costado derecho, a la altura del área del arco defendido por Damián Tello, Lautaro Geminiani impulsó con sus manos, una bola en forma de centro, para la aparición de Facundo Rivero. El Marcador Central, ganó y peinó para Sebastián Marfort. Este mismo Delantero, cabeceó la pelota y finalmente, el propio Facundo Rivero remató cruzado y desviado.   

A los seis, otra vez, avisó el elenco de Nueva Italia. Lo hizo, con un avance en profundidad de Axel Oyola, quien entró hasta la puerta del área por izquierda, y sacó un potente remate que a mano cambiada, Damián Tello despejó por encima del horizontal, al tiro de esquina, en forma espectacular, como de costumbre.

Durante la primera docena de minutos, el conjunto cordobés fue superior. Dominó y tuvo más el control territorial.

Recién cuando se jugaban veinticuatro minutos, Talleres tuvo su primera aproximación, con un centro de Fernando Enrique, que impactó de cabeza Nicolás Molina. Culminó en las manos de Joaquín Mattalía, que embolsó sin problemas.

Promediando la media hora, el juego era decididamente malo. No ofrecía acciones con vértigo. El dueño de casa, no quería realizar su mayor despliegue físico, a raíz del desgaste realizado cinco días antes, frente a un rival de otra jerarquía. Prefería, conservar el orden y no dejar espacios libres, para que el ponente aproveche. Los de Juan Carlos Olave, tampoco encontraba una conexión nítida con su único punta, pese a tener la zona de gestación medía, repleta de hombres Albicelestes.  

Sobre los cuarentaiún minutos, Fernando Enrique inició una maniobra en zona defensiva, prolongando el pase sobre la izquierda para Tomás Asprea. Éste, puso a correr a Patricio Romero, por ese sector. En una gran acción individual, cuando el Lateral Izquierdo pisó el área, sacó un remate cruzado contra el arco de Racing (Córdoba), que pasó muy cerca del palo izquierdo de Joaquín Mattalía.

Ya en el minuto de tiempo adicionado, Tomás Asprea se acomodó sobre la banda, y colocó un centro desde el sector izquierdo, que peinó Nicolás Molina. La pelota, concluyó cerca del palo izquierdo de Joaquín Mattalía.

La primera parte se fue, sin entregar mayores emociones. El resultado, calificaba el desarrollo de un encuentro deslucido. Dos protagonistas, que no había contribuido demasiado, en materia ofensiva.

Ya en el segundo tiempo, la historia arrancó bien complicada para el Tallarín, desde el comienzo mismo, impredeciblemente.

Se jugaron menos de sesenta segundos, y el Árbitro Marcos Recalde, tomó una decisión drástica y errónea, que condicionó demasiado al local. Axel Oyala, metió un bochazo largo en cortada, desde la mitad del campo, para Leandro Fernández, quien picó en ataque, por el andarivel central. En la marca, Fernando Duré lo sujetó y concretó una falta, que impidió que siguiera su marcha. El Juez, entendió que cometió una infracción, como último recurso contra la humanidad de Leandro Fernández, para cortar una acción manifiesta de gol. Por eso, le mostró la tarjeta roja directa. Pese al reclamo de los jugadores del Albirrojo, que le indicaban a Marcos Recalde, que el Mediocampista visitante, no iba en dirección recta al punto central del área, los de Remedios de Escalada se quedaron con uno menos, para afrontar los cuarenta y cuatro minutos restantes.

Racing (Córdoba), agrupó mucha gente en ofensiva, realizando movimientos tácticos en ataque. Mientras, Talleres armó un buen bloque defensivo, para apostar a la contra.

Juan Carlos Olave, entendió que sus dirigidos necesitaban más presencia arriba. En doce minutos, dispuso los ingresos de Bruno Nasta y Diego García, dos jugadores claves en el plantel, por Sebastián Marfort y Alan Olinick, respectivamente.

Pasado el primer cuarto de hora, el elenco anfitrión, necesitaba un recambio de figuras, para poder soportar la intensidad que demandaba, el ordenamiento defensivo y medio. Por eso, en diecinueve minutos, Martín Rolón mandó a la cancha a Sebastián Benega, para jugar como Mediocampistas izquierdo; llegó, en reemplazo de Agustín Campana. En la emergencia, Norberto Palmieri cubría el lateral diestro.

Cuatro minutos después, el banco cordobés actuó estrategicamente, y volvió a moverse. Matías Pardo, sustituyó a Lautaro Geminiani, para tener otro jugador más en la edificación ofensiva.

Sin embargo, la Academia no lograba hacer valer el jugador de más, con el que contaba en el terreno. Al Tallarín, le costaba muchísimo, atravesar la franja de la mitad del campo. Nicolás Molina, quedaba solo, en la puja con los cinco rivales que defendían.

Para el último cuarto de hora, Martín Rolón refrescó su estructura de ataque. Realizó tres variantes juntas: Sebastián Gallardo, Diego Guzmán y Rodrigo Cao, aparecieron en reemplazo de Nicolás Molina, Fernando Enrique y Tomás Asprea, consecutivamente, sobre la media hora clavada.

No obstante, el desarrollo era muy flojo. No aparecían los espacios, ni las variantes en el método elegido. No se generaban maniobras de riesgo. La Roloneta, redoblaba su sacrificio y esfuerzo físico.

Pese a lo cerrado que se presentaba el choque, a los treinta y cuatro minutos, los de Escalada tuvieron una acción que pudo haber cambiado el marcador. Marcos Recalde, accionó nuevamente en su contra. Alejandro Benítez, enarboló la cruzada hacia el arco rival, y Diogo Guzmán envió un centro, desde la puerta derecha del área. Rodrigo Cao, buscó conectar de cabeza, pero el Defensor Facundo Rivero, despejó con su brazo derecho. Era penal. Sin embargo, el Juez de la tarde, prefirió no cobrar la falta y omitir la sanción de la pena máxima. A esa altura, su interpretación era determinante para que el marcador siguiese en cero.

Encerrado, en la poca lucidez para cristalizar sus intenciones, el Entrenador Juan Carlos Olave, quería ganarlo, pero no regalarle nada al contrincante. Por eso, a los cuarenta minutos, ejecutó las últimas dos variantes, Rodrigo López y Juan Curuchet, entraron por Axel Oyola y Nicolás Sánchez, correlativamente.

Sobre el final, se produjeron dos situaciones de extremo peligro, a favor de Racing (Córdoba).

A los cuarenta y tres, Matías Pardo lanzó un pase profundo, cuando Diego García apareció solo dentro del área por la derecha, y probó los reflejos de Damián Tello, que obturó abajo. En el rebote, con el arco libre, desnudo y desguarnecido, el goleador Bruno Nasta, en forma increíble, elevó por encima del arco, en  la situación más clara y evidente del juego.

Ya en tiempo de descuento, con siete minutos adicionados, Talleres tuvo una. A los cuarenta y seis, tras un centro por derecha de Rodrigo Cao, Sebastián Benegas quedó de frente al arco. Entre el Defensor Facundo Rivero, que cubrió; y el Arquero Joaquín Mattalía, que una gran reacción, retuvo con sus manos abajo y salió jugando, los de Nueva Italia, sostuvieron el cero. En la contra, Diego García jugó velozmente y profundizó, hasta descargar en tres cuartos de cancha, con Matías Pardo. Y éste, apostado como extremo por la derecha, trazó una recta horizontal de ese sector al medio y soltó para Rodrigo López, quien la paró de pecho y disparó un potente remate, que buscaba el ángulo superior izquierdo de Damián Tello. Nuevamente, en forma inconmensurable, el Arquero mendocino, desvió al tiro de esquina, para blindar el cero en su valla.

De esta manera, el tiempo se expiró y la igualdad se selló definitivamente. La falta de audacia y resolución, de la visita; y la necesidad de no quedarse con las manos vacías, con un  hombre menos durante un tiempo, ante su gente, por parte del local, argumentaban este resultado discreto.

Talleres se quedó con un punto, que aún no le permite despegar de los últimos cinco puestos de la Tabla, aunque se aprecia la cosecha, por el modo en el que terminó consolidándola. También, tiene que reconocer, que le costó una vez más, destrabar el duelo, cuando estaban ambos con once. Este obstáculo, viene presentándose como local, desde el arranque del certamen.

Tras una secuencia muy intensa, con tres partidos en diez días, y un viaje de por medio, los Albirrojos debe apuntar a mejorar su producción, en este último módulo de cinco partidos, que restan para completar la primera ronda. Debe hacerlo, a los efectos de poder terminar la ronda inicial, lejos del final de la Tabla.

SISTESIS:

TALLERES 0

Damián Tello; Fernando Duré, Federico Sánchez, Nicolás Malvacio y Patricio Romero; Agustín Campana (64’ Sebastián Benega), Norberto Palmieri, Alejandro Benítez (92’ Maximiliano Rogoski) y Tomás Asprea (75’ Rodrigo Cao); Fernando Enrique (75’ Diogo Guzmán); Nicolás Molina (75’ Sebastián Gallardo).

Suplentes: Mauro Casoli, David Achucarro, Ciro Campuzano y Dylan Vergara.

DT: Martín Rolón.

RACING (CÓRDOBA) 0

Joaquín Mattalía; Lautaro Geminiani (67’ Matías Pardo), Facundo Rivero, Gianfranco Ferrero y Fernando González; Gonzalo Rostagno; Alan Olinick (57’ Diego García), Axel Oyola (85’ Rodrigo López), Nicolás Sánchez (85’ Facundo Curuchet) y Leandro Fernández; y Sebastián Marfort (57’ Bruno Nasta).

Suplentes: Álvaro Maslovski, Luca Frenguelli, Rodrigo Sayavedra y Francisco Robles.

DT: Juan Olave.

Amonestados: Federico Sánchez, Fernando Enrique, Alejandro Benítez y Rodrigo Cao (T); Facundo Rivero  y Bruno Nasta (R).

Expulsado: 46’ Fernando Duré (T).

Estadio: Talleres (Regular).

Árbitro: Marcos Recalde (Mal).

Asistentes: Rubén Bustos y Nicolás Gruccio.

Cuarto Árbitro: Ignacio Lupani.

Recaudación: No fue suministrada.

Público: 3.000 personas aproximadamente.

 Foto Prensa Talleres. Nicolás Malvacio, gana en la altura, ante Fernando González.

 Foto Prensa Talleres. Tomás Asprea, arranca en la mitad del campo, durante la etapa inicial. 

Foto Prensa Talleres. Diogo Guzmán, ingresó en el complemento, cuando jugba con diez hombres.