Igualó ante Cole, y complicó a los de Munro

Talleres empató 2 – 2 ante Colegiales, en Munro, en la comienzo de la tarde del Sábado, en un pleito dinámico y vibrante, y arruinó los planes de un rival que tenía la posibilidad de quedarse con el Torneo Clausura ese misma jornada. Al cumplirse apenas el primer cuarto de hora exactamente, Juan Ignacio Celaya recogió el rebote que dio el arquero debutante Agustín Mengua, y convirtió el gol para el local, que ganaba y soñaba con el título. En esa etapa inicial, el elenco de Darío Lema fue muy superior durante los primeros treinta minutos, y justificaba ampliamente la victoria, frente a un Albirrojo que tenía varias bajas sensibles en su conformación inicial. Sin embargo, para el segundo tiempo, Norberto D’Angelo mandó al campo a Dylan Vergara y eligió atacar con tres delantero. La actitud del Tallarín fue otra. Se animó, dominó y lo dio vuelta parcialmente. Con un bombazo desde el área grande, Alejandro Aranda le rompió el arco a Juan Figueroa, para el empate, a los nueve minutos del complemento. Y fue por más. A los veintiséis minutos, Lucas Farías interceptó el recorrido de un cabezazo de Nicolás Malvacio, para poner en ventaja a los de Escalada. Herido y urgido, el Tricolor se vio a obligado a ir por la remontada y Franco Caballero con un cabezazo letal, logró la igualdad, a los treinta y cinco. En un final con muchísima intensidad, a todo ritmo, el reparto de puntos terminó siendo justo. El Albirrojo, que hace cinco partidos que no logro una victoria, con este punto quedó octavo en la Tabla General y buscará en la última fecha, ante Acassuso, tratar de volver al triunfo intentando mejora su ubicación en esa clasificación, aspirando a ser local en la primera fase.

vs Colegiales 33º 2022 00

Foto Talleres 2.0. Talleres se quedó con un punto en Munro, ante un rival que lo lamentó.


Un punto en Munro, ante a un Colegiales que no pudo cumplir con su objetivo, y quedó complicado para la definición del Torneo Clausura. Cómo si fuese alguna compensación de la justicia divina. Frente a aquel mismo oponente, al que no había podido vencer en Escalada, en Mayo de 2009, en el desenlace de la Temporada 2008/09, cuando Talleres necesitaba indispensablemente el triunfo, para quedarse en la Primera B. Esta vez, fue el Albirrojo, quien actuó como juez y bloqueó el camino hacia el triunfo de los de Munro, que con esta igualdad, quedaron segundo en la Tabla del Clausura, a raíz de haber sido superados por el Deportivo Armenio, en la disputa por ganar este Torneo, cuando sólo resta una fecha por jugarse.

En el comienzo de la tarde, en el Libertarios Unidos, estaba todo preparado para que Colegiales viviera una fiesta. El equipo de Darío Lema, que viene de quedarse en las puertas de la Primera Nacional, tras haber perdido en forma consecutiva, las dos finales de la Temporada 2021 -ascenso directo y Reducido-, buscaba un triunfo para seguir siendo el líder del Clausura y en una de esas, quedarse con el Torneo, si Armenio caía como visitante ante Comunicaciones.

Ese mandato que tenía que llevar Cole a la práctica, quedó en evidencia durante la primera parte del juego, en la que fue ampliamente superior ante un rival, que llegaba con varias bajas en su alineación titular. Entre suspendidos y lesionados, Norberto D’Angelo, a menos de noventa y seis horas de haber jugado el último encuentro, eligió un equipo con los jugadores que tenía a disposición. Claro que, contaba con la tranquilidad de saber que ya se ha alcanzado la clasificación al Torneo Reducido, en la definición por el único ascenso.

A los cuatro minutos, con un Colegiales protagonista, ganó en velocidad Martín Rodríguez, quien desbordó por izquierda y tiro el centro rasante. No llegó Ivo Kestler a conectar, pero aprovechó Lucas Lezcano, apareciendo por el segundo palo. Definió exigido y sin mucha puntería. La pelota, pegó contra la pared, a centímetros del palo izquierdo.

El Tricolor, el impregnaba ritmo y dinamismo a su juego. Toques precisos, en velocidad, en forma vertical, aprovechando las dimensiones pequeñas y el buen estado del campo, era una imagen repetida.

El Tallarín, asomó por el arco local, recién a los once minutos, cuando Fernando Enrique, en la continuidad de una acción que nació en un tiro de esquina por el sector izquierdo, envió un centro, que atenazó en el aire, Juan Figueroa.

En ese mismo pasaje del partido, a los trece minutos, el capitán Fernando Enrique, disparó un tiro libre desde la izquierda, que alcanzó a impactar Patricio Romero con el taco, pero la bola terminó en las manos de un Juan Figueroa, que contuvo abajo y con solvencia.

Aunque a los quince minutos de esa etapa inicial, el partido se abría para Colegiales, como tanto deseaba. Llegaría el primer grito de la tarde. Tiro libre ejecutado por Juan Manuel Torres, que remató al arco. En una floja reacción del debutante Agustín Mengua -a quien el esférico, le pica antes -, entregó un rebote largo, que le permitió tomar al segundo marcador central Juan Ignacio Celaya, y empujar el balón al fondo de la red. Así, generar el delirio en Munro. Colegiales estaba en ventaja 1 – 0, cuando apenas se había jugado el primer cuarto de hora del encuentro.

Con el resultado a su favor, seguía dominando el Tricolor. Un pase largo desde el fondo de Colegiales, de Agustín Battipiedi, lo dejó mano a mano al mediocampista Juan Manuel Torres, que definió por encima de Agustín Mengua, quien alcanzó a meter el manotazo providencial. Inmediatamente, salvo Nicolás Monserrat en la línea, desviando la pelota con un rechazo potente, en veintiséis minutos. Era un momento muy complicado, para la visita.

Superada la barrera de los treinta minutos de ese primer tiempo, en el que el local había dominado con comodidad, bajó su intensidad en la conexión con el balón. También las embestidas en ofensiva. A partir de eso, el Tallarín cobró protagonismo en el manejo de las situaciones del partido.

Cuando el reloj apunta casi el minuto treinta y dos, en una salida de contra, Alejandro Aranda metió un pase larguísimo para Lucas Farías, desde la mitad de la cancha. Matías Machado, en retroceso, rechazó como pudo hacia el mismo sector. El propio Alejandro Aranda, recolectó en tres cuarto de campo y definió al arco, buscando convertir por arriba del arquero. Juan Figueroa, ya había recuperado su posición en el área grande, y tomó la bocha en el aire, para apagar el peligro.

Un minuto más tarde, en treinta y tres minutos, Patricio Romero estuvo con un disparo, cerca de marcar la igualdad. Después de un pase característico de Fernando Enrique, desde el círculo central, Patricio Romero sorprendió en su aventura ofensiva. A la altura de la medialuna del área, sacó un remate que pasó a milímetros del ángulo superior izquierdo de Juan Figueroa. Fue la más importante de Talleres, en la primera parte.

Sobre el final de la primera parte, llegó la polémica. Una jugada típica de aquellas, en las que Eduardo Gutiérrez resuelve históricamente, en perjuicio de Talleres. Marco Lambert, ejecutó un tiro de esquina desde la izquierda, y Juan Ignacio Celeya tocó el balón con el brazo derecho, para amortiguar un cabezazo de Nicolás Malvacio. Era penal, que no fue sancionado por el árbitro. Los jugadores del elenco de Escalada reclamaron enfáticamente. Finalmente, resultó amonestado Fernando Enrique.

El choque entraba en el descanso, con un Colegiales que había alcanzado un nivel de juego y precisión para justificar la victoria parcial, aunque el rival había despertado e inquietado, con un tanteador que estaba abierto.

En el comienzo de la segunda mitad, Norberto D'Angelo metió mano en el equipo. Introdujo una variante ofensiva. Permitió el ingreso de Dylan Vergara, para jugar como un delantero más sobre la derecha y atacar con tres delanteros, en reemplazo del primer marcador central Alan Salmanton, que ya se había ganado una amarilla y jugaba al límite.

Talleres mostraba un mejor semblante, en ese primer pasaje del complemento. Más firme, con Nicolás Monserrat y Nicolás Malvacio ordenando defensivamente, el equipo se adelantó. Cole, se mostraba frágil, vulnerable; daba cuentas de su desgaste y nerviosismo.

Como pocas veces en la Temporada, el Tallarín leyó bien el momento del partido. Aprovechó para golpear y empatarlo. A los nueve minutos, en una acción que se gesta en la mitad del terreno, Alejandro Aranda recibe y aguanta un lateral por derecha. Combina, con Dylan Vergara, que se filtró por la banda y aceleró en diagonal. A la altura de la línea del área grande, el ingresado en la segunda parte, asistió al medio al santiagueño Alejandro Aranda, quien controló y remató al arco. Con muchísima vehemencia, disparó al arco y la bola, luego de impactar en el travesaño, se metió adentro del arco local. Fierrazo y a cobrar, para cantar el empate 1 – 1.

Inmediatamente, la visita buscó algo más. Sobre los once minutos, Alejandro Aranda, que se había sacado la mufa de encima, luego de más de veintiún partidos sin convertir un gol, en una jugada casi calcada a la del gol, desde la misma posición, recibió un pase de Dylan Vergara y sacó otro remate al arco, se fue apenas por encima del horizontal.

Era el mejor momento de Talleres en el partido y probablemente, el más destacado de estos últimos cinco juegos disputados. Tenía el balón y arrinconando al dueño de casa, que no lograba reponerse tras el gol del empate. A tal punto, que al percibir esa superioridad de la visita, en aquel tramo de la tarde, el público local desató una lluvia de serpentina que entre el cese y la quita de las mismas, demoró ocho minutos la reanudación del encuentro.

El cronometro marcaba ya los veintiséis minutos, y los de Remedios de Escalada hicieron valer una acción que resultó clave. Tiro de esquina desde la izquierda, ejecutado por Marco Lambert, en forma de centro abierto. De cabeza, Nicolás Malvacio ganó en la cancha de arriba, dejando la pelota viva y en recorrido al arco. Y Lucas Farías, en el área chica, con una pirueta, empujó la para dar vuelta el marcador. Para sorpresa de todos, el Albirrojo estaba en ventaja 2 – 1.

Luego de semejante mazazo, Darío Lema metió dos cambios juntos, sobre los veintinueve minutos, con la idea de arremeter por el empate. Franco Caballero y Pablo Oro, sustituyeron a Axel Paiva y Lucas Lezcano, en consonancia con la ofensiva.

Con el empuje de su gente, y a fuerza de centros, llegaría el empate. Una pelota detenida, sería fundamental, para lograrlo. Un tiro de esquina, a los treinta y cuatro minutos y fracción -a casi diez del final-, se proyectó en forma centro por el sector izquierdo, desde los pies de Martín Rodríguez. Con un cabezazo potente, ganó Franco Caballero a la altura del cuadro menor, para empatar e ilusionar a los de Munro. El encuentro estaba 2 – 2, y nadie se animaba a dar un pronóstico.

De allí en adelante, el enfrentamiento fue emotivo, en el ida y vuelta. Aunque a ambos elencos, le faltó lucidez, para poder generar una acción que les diese el triunfo. De todos modos, el equipo de Norberto D’Angelo, no estaba disconforme con el resultado y entendía que era un buen negocio, por el contexto en que se producía. Cole, necesitaba el triunfo, conociendo ya que Armenio estaba en ventaja ante Comunicaciones, pero tampoco quería regalarse a riesgo de perder el punto.

Con cinco minutos adicionados al tiempo reglamentario, Eduardo Gutiérrez le bajó la persiana al choque y se repartieron los puntos.

Talleres se trajo una unidad para Remedios de Escalada, en un partido muy complicado. Si bien no modificó demasiado la ecuación en la Tabla General, sumó ante el mejor equipo en la sumatoria de esa misma cuenta. Dejó una saludable imagen, en el complemento, a partir de sus intenciones en ataque y su ambición, que lo llevó a dar vuelta el marcador parcialmente, por merecimiento propio.

No obstante, el Tallarín no debe perder de vista, su muy pobre cosecha sobre los últimos cinco partidos disputados; no ganó ninguno; empató dos; y perdió tres seguidos. Indudablemente, volver a obtener una victoria y lograr esa solvencia que se necesita para pasar de fase, son objetivos inmediatos a alcanzar. Con muchas bajas, dentro de lo que es su corto plantel, y varios juveniles que se han ido ganando un lugar -a partir de las circunstancias-,  tendrá que trabajar para recuperar aquellos lesionados que tiene y pensar estratégicamente en función lo que viene, buscando superar todo escollo e instancias, para estar presente en la definición final de la Temporada 2022.


SISTESIS:

COLEGIALES 2

Juan Figueroa, Matías Machado, Agustín Battipiedi, Juan Ignacio Celaya y Martín Rodríguez; Tiago Luna; Lucas Lezcano (74’ Pablo Oro), Adrián Fernández (80’ Manuel Falón), Axel Paiva (74’ Franco Caballero) y Juan Manuel Torres; Ivo Kestler.

Suplentes: Nicolás Báez, Sebastián Martínez, Arturo Ordano y Cipriano Treppo.

DT: Darío Lema.

TALLERES 2

Agustín Mengua; Alan Salmanton (45’ Dylan Vergara), Nicolás Monserrat y Nicolás Malvacio; Luciano Arcuri, Sebastián Gallardo, Patricio Romero y Marco Lambert; Fernando Enrique (85’ Isaías Ciavarelli); Alejandro Aranda y Lucas Farías (85’ Federico Peralta).

Suplentes: Agustín Galván, Luis Monge, Diogo Guzmán y Ángel Gómez.

DT: Norberto D’Angelo.

Goles: 15' Juan Ignacio Celaya y 79' Franco Caballero (C); 54' Alejandro Aranda y 71' Lucas FarÍas (T).

Amonestados: Axel Paiva y Juan Torres (C); Alan Salmanton, Fernando Enrique y Nicolás Malvacio (T).

Estadio: Colegiales (Muy Bien).

Árbitro: Eduardo Gutiérrez (Mal).

Asistentes: Martín Vaccaro y Luis Castillo.

Cuarto Árbitro: Mariano Seco.

Recaudación: No fue suministrada.

Público: 2500 personas aproximadamente.