¡Talleres volvió a la Primera Nacional!

¡Talleres Campeón! ¡Ascendió y volvió a la Primera Nacional! ¡Gloriosa, la Máquina del Sur! El Albirrojo venció 0 – 1 a San Miguel, en el Complejo Olímpico Malvinas Argentinas, por la Segunda Final por el Ascenso Directo de la Primera B 2023 a la Primera Nacional, con un gol de Lautaro Villegas a los treinta y cinco del Segundo Tiempo, se consagró Campeón y se quedó con el bendito Ascenso, para regresar a la Segunda Categoría, luego de más de veintiocho años de postergaciones. La Roloneta, lo hizo posible. En la adversidad, sin en el Entrenador Martín Rolón que había sido expulsado, en un partido en el que el rival empujaba, aprovechando su localía, el equipo Tallarín sacó a relucir su temperamento y garra. Y consiguió el gol del triunfo, en una que fabricaron Fernando Enrique y Lautaro Villegas, faltando diez minutos para el cierre del tiempo reglamentario. Luego, supo resistir la embestida, de un rival que sintió el impacto del tanto, desde lo emocional y físico. Sostenido por su muralla, Damián Tello, hasta pudo haberlo liquidado, antes del pitazo final. tras más de siete minutos de adición al tiempo reglamentario, Javier Delbarba dio por concluido el capítulo y los jugadores, se abrazaron y deliraron, junto a los dirigentes y allegados que fueron a alojados en un pequeño sector. Una de las conquistas, más épicas de su historia, que se inscribe en las páginas doradas de las Memorias del Club Atlético Talleres. Martín Rolón, junto a este equipo que reconfiguró, lo hizo posible, con números incontrastables. En Remedios de Escalada y alrededores, con felicidad plena y pasión, los hinchas celebraron desde el final del partido; recibieron el micro con una gran caravana y los festejos se desarrollaron hasta la medianoche, en las instalaciones del Club. ¡Vaya Talleres, celebre! La gira Nacional, comienza de nuevo.

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 99

Foto Mono Gómez. Talleres es Nacional, otra vez y lo celebra hasta nuevo aviso.


¡Talleres es Campeón de la Primera B! ¡Logró el ansiado ascenso! ¡Después de más de veintiocho años, está de regreso en la Primera Nacional! El elenco conducido por Martín Rolón, le devolvió a la Categoría, a una institución que desde mediados de 1995 a esta parte, soñaba con volver a jugar en la Segunda Divisional del fútbol argentino. Fue un justo ganador, de esta serie inolvidable, ante San Miguel. En un partido largo -compuesto por dos juegos de noventa minutos cada uno-, muy cerrado, disputado, fue inteligente en su planteo. Sólido, para blindar su arco; hábil, con la pelota; inquebrantable, en la disputa de cada balón; y pragmático, para capitalizar una maniobra de laboratorio, que generó en ataque, para que quedarse con el Ascenso. Derrotó 0 – 1 a San Miguel, en el Estadio Malvinas Argentinas, con un tanto antológico de Lautaro Villegas, a los treinta y cinco de la segunda parte, a diez minutos del final de esta zaga, y jugando como visitante, frente a una multitud en su contra, supo sellar el tanteador y se trajo para Remedios de Escalada, el Ascenso al Nacional.

Este conjunto de Talleres 2023, ingresó en el libro de las Memorias Doradas, de la historia Albirroja. Acaba de lograr, un hito para el fútbol profesional de esta entidad. Recupera la Segunda División, un Club que necesitaba transitarla nuevamente, pare reposicionar definitivamente su marca. Esa, que se levantó de su propia Quiebra y lo profundo de la Primera C; creció a niveles altísimos, en su estructura edilicia, en los últimos quince años. Aunque no había podido, acompañarlo con éxitos deportivos, y el despegue de Categoría, que le permita mostrarse en la vidriera de la antesala de la Liga Profesional. La Roloneta, un equipo que se rearmó tras la salida de Matías De Cicco (7° Fecha - Torneo Apertura), como producto de la turbulencia, y puso fin a varias campañas malas y otras tantas decepcionantes. Derribó con golpes certeros, un muro de penurias. Lo doblegó. Con trabajo, esfuerzo y personalidad. Tuvo identidad propia, para llevar a cabo lo que quería, dentro de la cancha. Y logró atravesarlo, para conquistar el objetivo máximo, que ahora le permite divisar en el horizonte, el territorio nacional completo.

Esta segunda Final, en Los Polvorines, como había ocurrido en la Ida, fue intensamente disputados, por los dos protagonistas. A diferencia del encuentro que se jugó en Remedios de Escalada, San Miguel buscó ejercer presión, desde su condición de local. Tomó la iniciativa, frente a un visitante, que siempre estuvo bien plantado y no regaló situación alguna.

Analizado, ya con una dosis menor de ese efecto electrizante que magnifica cada situación, en el momento que trascurren los hechos, el encuentro no entregó demasiadas situaciones nítidas, a la hora de mediar las opciones de gol, que tuvo cada equipo. Esto, tiene directa relación, con la paridad que hubo entre el primero y el segundo de la Tabla General, durante la Temporada. Sin embargo, el más eficaz, fue Talleres. Con el brillo de Damián Tello, Fernando Enrique y Lautaro Villegas, entre otros grandes baluartes, se quedó con el campeonato.

El Estadio Complejo Olímpico Malvinas Argentinas, estaba repleto. La hostilidad hacia los de Escalada, se sentía en cada rincón. El juego, tardó varios minutos en comenzar, producto de algunos objetos y variados fluidos, que arrojaban sobre el banco de suplentes, donde se ubicaban los dirigidos por Martín Rolón. Las garantías, no parecían ser totales. Había un desborde del afluente de público, en relación a lo que puede albergar un escenario de esas características.

En el arranque, el Trueno Verde fue con mayor determinación. Aprovechando la efervescencia de su público, tuvo la primera aproximación de peligro, en el caluroso mediodía el Sábado. A los cuatro minutos, llegó un tiro de esquina cerrado, desde la derecha de su ataque, ejecutado por David David Muller, que buscó meterse en el primer palo. Pero apareció Damián Tello, con un puñetazo salvador, para despejar y luego, completó Fernando Enrique, reboleando hacia adelante.

El duelo, ostentaba mucha fuerza, en cada cruce. El Tallarín, mostraba una faceta distinta, a la que lo llevó a ser Ganador del Clausura. No asociaba tanto por abajo, en sus salidas; despejaba con pelotazos largos, para evitar las aproximaciones del conjunto de Gustavo Coleoni. A su vez, el partido se volvía a entrecortar otra vez, como en el primer juego, producto de la rispidez y reclamos constantes.

Talleres, tuvo la primera clara, a los veinte de esa etapa inicial. Un tiro libre ejecutado, desde la derecha por Alejandro Benítez, que peinó Rodrigo Cao y por detrás de todos, no pudo conectar a la red Nicolás Malvacio, quien vio como la pelota se perdió por la última línea.

De todos modos, el Albirrojo logró superar el primer cuarto del partido, con pocos sobre saltos. El local, no había logrado su cometido. No pudo llevarlo por delante, en ese primer pasaje. Fernando Duré, metía con ímpetu, en cada cruce. También Nicolás Malvacio, para no ceder ningún balón.

No obstante, San Miguel tuvo sin dudas la más nítida de esa primera etapa, cuando el reloj señala el minuto veinticinco. Y la figura una vez más del Arquero Damián Tello, se agigantó al máximo nivel, para transformarse en un superhéroe de esta escena de la historia. De un lateral por derecha impulsado a modo de centro por Dixon Rentería, a la altura del área de grande de Talleres, Rodrigo Díaz rosó la pelota con la cabeza. Y apareció Ezequiel Melillo, con una pirueta de chilena, que salió en forma de habilitación hacia Jorge Ferrero, quien en el cuadro menor y casi debajo del arco, no pudo convertir, dado que se topó con el manotazo salvador de Damián Tello, que valió el Ascenso. Descomunal, tapada abajo cuidando su palo derecho, para aguantar el cero en el arco Tallarín, enviando la pelota al tiro de esquina.

El Albirrojo, no lograba controlar con comodidad el balón, en la zona media. Allí, la disputa era áspera. No había margen, para maniobrar y construir con elegancia. Alejandro Benítez, se sumaba a la línea defensiva. Fernando Enrique, era el eje de conducción. Rodrigo Cao y Lautaro Villegas, daban batalla en cada cruzada ofensiva, buscando complicar a una defensa liderada por Dixon Rentería.

Las cosas fueron más adversas para Talleres, desde los treinta y cinco minutos. Fernando Duré, tuvo un cruce con Ezequiel Melillo, en una pelota dividida, en la puerta del área grande de Damián Tello. Ambos, mantuvieron una puja que se extendió algunos segundos. Producto de un reclamo recargado de Martín Rolón, por lo sucedido en esa acción, el Árbitro Javier Delbarba, decidió expulsar al Entrenador visitante. El equipo forastero, se quedaba sin su orientador táctico, para diputar más de cincuenta y cinco minutos. Martín Rolón, iba a tener que seguirlo desde el vértice de una incómoda tribuna tubular, y manejarse con un intercomunicador, para emanar las indicaciones, hacia sus asistente Federico Patiño y Mauro Marrone, que quedaron a cargo de los controles de la Máquina del Sur.

El primer tiempo, no dejó más situaciones de vértigo. Se fueron al descanso, sabiendo que un error o un detalle, iba a ser determinante en la serie.

Ya en el complemento, el partido entraba en tiempo de definición, aunque los dos elencos guardaban energías, por si acaso había que seguir jugando un tiempo suplementario de treinta minutos más.

Al minuto y medio, Talleres tuvo una oportunidad, luego de un centro largo enviado por Fernando Duré, desde la banda derecha. Francisco Manenti, intentó despejar de cabeza, pero la pelota rebotó en Dixon Rentería. Allí, apareció Lautaro Villegas, por el vértice izquierdo del área chica, en un anticipo de lo que vendría, para la resolución del partido-, y le pegó mordido al arco. Por un raro efecto, el Marcador Central Francisco Manenti, terminó rechazando con la cabeza nuevamente, para enviar la bocha hacia un costado.

Inmediatamente, San Miguel intentó con dos remates certeros de media distancia, en sus intentos iniciales de romper el cero.

El primero de ellos, fue con una combinación en ataque, entre Federico Sena y Jorge Ferrero, para habilitar libre por el medio a David Muller, quien sacó un disparo apenas desviado, por encima del horizontal, a los dos minutos.

Allá por los siete minutos, el Trueno Verde tuvo un tiro libre frontal al arco, que David Muller ejecutó muy desviado, por encima de la valla.

Más tarde, en once minutos, cayó sobre el área de Talleres, un centro de Peter Martínez Grance, desde la izquierda. El cierre certero de cabeza por parte Patricio Romero, alcanzó para enviar la bola al tiro de esquina. De ese modo, evitó la arremetida de Iván Regules por detrás de todos, quien buscaba abrir el marcador.

En el banco visitante, entendieron que era el momento de realizar la variante planificada, que estaba preestablecida, a partir del trabajo de la semana. Agustín Campana, reemplazó a Ciro Campuzano, para ir con energía renovada, a someter a de Peter Martínez Grance por la derecha de la ofensiva.

Los de Gustavo Coleoni, parecían haber dejado pasar su momento de mayor explosión.

Luego de esa modificación, Norberto Palmieri recuperó de cabeza en el círculo central, y Agustín Campana se escapó por el medio. Terminó lanzando un remate muy por encima del parante superior, a los dieciocho, queriendo sorprender.

Ingresando en el último cuarto de juego del tiempo regular previsto, Patricio Romero debió dejar la cancha, dado que en la cobertura frente a Francisco Manenti, desvió una pelota al lateral, exigiéndose al máximo desde lo físico. Se resintió de una dolencia muscular en la pierna izquierda, que le impidió seguir adelante, en la batalla final. Luciano Arcuri, ingresó para cubrir la banda. A su vez, Gustavo Coleoni aprovechó para mandar a dos estandartes de su mediocampo, como Nahuel Sica y Matías Rojas, que reemplazaron a Federico Sena y David Muller, respectivamente. Seguramente, el Entrenador de los del Noroeste del Gran Buenos Aires, pensó que la definición de la Serie, entraría en tiempo suplementario. Apostó sobre el final, por las bases más sólidas que tuvo su columna vertebral, a lo largo del año.

Cuando el reloj ya marcaba los veintisiete minutos, Iván Regules recibió un pase desde las proximidades del área grande y trazó una diagonal, y sacó un tiro potente desde casi treinta metros, que otra vez con una magnífica reacción, Damián Tello desvío por encima del horizontal, al tiro de esquina.

Pasada la media hora, el Trueno Verde ya había hecho un gran despliegue, para intentar lograr romper la monotonía del cero. En treinta y uno, tuvo una maniobra a partir de un tiro libre de Peter Martínez Grance, desde el borde izquierdo, que Rodrigo Díaz cabeceó por encima del poste superior. Pasó cerca.

El anfitrión, no lograba sortear exitosamente, esa zona de embudo, que parece estar cerrada con lazos de acero, que evitan la llegada de los oponentes. No avizoraba huecos libres, para penetrar en el área de Damián Tello. Fernando Duré, Nicolás Monserrat y Nicolás Malvacio, en la línea final; Agustín Campana, Norberto Palmieri, Alejandro Benítez y Luciano Arcuri, estaban extraordinariamente finos y sutiles, para cortar y robar, cada bocha que intentaba filtrarse por los conductos.

Claramente, hubo un quiebre en el trámite. Se percibió y anticipó, desde la cabina de Frecuencia Albirroja. Entrando en el minuto treinta y cuatro, San Miguel bajó un cambio en su marcha. No pudo mantener la intensidad de disputa. En cambio, Talleres comprendió que era un momento apropiado en el final, para mantener ocupado el rival, contra el arco de Joaquín Pucheta. Lautaro Villegas, se había recostado por la izquierda en el complemento, para ganarle el duelo personal, al más flojo de la defensa, Francisco Manenti.

En treinta cinco minutos, cuando no parecía que fuesen a aflorar demasiadas oportunidades para abrir el marcador, la pelota impactó contra la mano de Dixon Rentería, en la mitad del terreno, sobre sector derecho. Agustín Campana, reclamó y ganó un tiro libre para su equipo. Fernando Enrique, con sus veinte años de experiencia, Capitán y talismán en materia de Ascensos, adelantó el esférico varios metros, para articular la maniobra de probeta. De memoria, puso en órbita, un centro altísimo, que cayó en el interior del área grande del local. El Defensor Francisco Manenti, se durmió en la marca. Y el Goleador Lautaro Villegas amortiguó la pelota con el pecho, controló ingresando por la izquierda del cuadro mayor y sacó un potente tiro bajo, que terminó incrustándose contra la red hacia el palo izquierdo del Arquero Joaquín Pucheta. Así, Lautaro Villegas convirtió sin dudas, el gol más gritado en la vida futbolística de Talleres, en las últimas tres décadas. El poder de efectividad del Campeón, apareció en su máximo esplendor. Lautaro Villegas, se convirtió en la estrella de la tarde, para comenzar a sacar el pasaje nacional, a menos de diez minutos para el cierre del tiempo reglamentario. Los jugadores, Cuerpo Técnico y allegados, deliraban al son del conmovedor grito de gol, de un triunfo que sería histórico.

Con el marcador arriba, el juego se partió. El reloj, jugaba en contra del local, que sintió enormemente, el impacto de un golpe letal. La desesperación de San Miguel, pudo hacer que Talleres tenga más espacios para aumentar la cuenta. Fue así, como tuvo un par de situaciones mano a mano, para poder cerrarlo sin sufrir hasta el último suspiro.

Primero, a los treinta y nueve, Agustín Campana rechazó de cabeza, un bochazo dividido. Por el carril central, se escapó en velocidad Lautaro Villegas, quien logró quedar de cara al gol, pero Joaquín Pucheta, apareció con sus manos, para evitar una nueva caída.

El Tallarín, tocaba la pelota. Más suelto y plenamente seguro. Martín Rolón, dio las instrucciones a su Ayudante Federico Patiño, para que ingresen Franco Zicarelli y Dylan Vergara, por Alejandro Benítez y Rodrigo Cao, respectivamente. La idea era, antener el ritmo, la intensidad y presión, de mitad de campo hacia adelante, para alejarlo de la zona más peligrosa.

Cuando el reloj señaló el minuto cuarenta y cinco, los de Gustavo Coleoni era puro desconcierto e impotencia. No obstante, el Árbitro Javier Delbarba, adicionó siete minutos más, y le devolvió la vida. Entonces, el Albirrojo mordió los dientes y trabó en el alma, en cada enfrentamiento individual, sabiendo que ascender, sólo dependía de su tenacidad.

Sobre los cuarenta y siete, Peter Martínez Grance se escapó por el andarivel izquierdo, y eyectó un centro que Pablo Ortega a la altura del área chica, cabeceó y se fue desviado, por encima de la valla. Una inmejorable situación para la igualdad, desperdiciada.

A continuación, cuarenta y siete y fracción, Dylan Vergara presionó en la salida a Peter Martínez Grance, por la izquierda. Le ganó la pulseada y se escapó en dirección al arco. Pero Joaquín Pucheta, amortiguó con las piernas y el propio Peter Martínez Grance, la sacó desde su área grande.

Ya en cuarenta y ocho, cuando San Miguel atacaba por el sector donde se ubicaba el grupo más importante de su parcialidad, Agustín Campana recuperó la pelota, y tras un rebote en Fernando Enirque, metió un misil profundo, para la corrida solitaria del enorme Lautaro Villegas. El neuquino, se fugó al vacío, arrancando desde su propio campo, con un marcador que lo veía desde atrás a más de cinco metros de distancia. Avanzó hasta la zona de definición, y cuando resolvió disparar apenas por encima de la humanidad del Arquero, Joaquín Pucheta, obturó con su brazo y mientras el goleador fue a buscar el rebote para coronar. Igualmente, el Guardameta se adueñó de la bola, con un revolcón en el piso.

Segundos después, Ezequiel Melillo lanzó un bochazo desde la mitad de la cancha, que Damián Tello controló monumentalmente, embolsando y recostándose en el campo de la gloria.

Para una heroica -que no llegó-, Gustavo Coleoni, dispuso el ingreso Gerardo Alegre Rojas por de Iván Regules, para buscar la salvación en la cancha de arriba, en menos de dos minutos que quedaban para salvar la ropa. Tras la variante, Joaquín Pucheta mandó un pelotazo desde su campo, pero Cristian Chávez cabeceó, sin la fuerza suficiente, para doblegar las manos del blindado Damián Tello.

El final, tuvo su parte altísima emotiva, dado que Dixon Rentería ganó un tiro de esquina, y desde la derecha, llegó el último cañonazo de la batalla de Los Polvorines. El Árbitro, adicionó ¡un minuto más!, cuando ya se habían cumplido los ¡cincuenta y dos! Ezequiel Melillo, puso la mira en el área, ejecutó y Rodrigo Díaz, cabeceó desviado.

Entonces, las especulaciones se terminaron porque Javier Delbarba, decidió que el final llegara como un acto de justicia real. El pitazo culmine, sonó en Los Polvorines y se escuchó hasta en Remedios de Escalada. Talleres ganó este durísimo pleito, y se consagró Campeón de la Primera B 2023. Regresó a la Primera Nacional, tras casi tres décadas de frustraciones.

¡Éxtasis! ¡Llantos! ¡Locura! y ¡Pasión! Se desató un desahogo, en un festejo medido, en un terreno absolutamente enemigo. Basado en lo que fue su principal sustento en la campaña, la hidalguía para ganar como visitante, como lo hizo en la mayoría de los estadios, esta vez definitivamente, el Albirrojo de Martín Rolón escribió un nuevo capítulo épico s, de su propia vida de película. Los gritos, saludos y cánticos, se compartieron con un puñado de menos de doscientos dirigentes, allegados e integrantes del plantel, que oficiaron como embajadores de miles de almas Albirrojas, que deliraron a distancia, por la vuelta a la Segunda Categoría.

La nueva versión de la Máquina del Sur 2023, obtuvo el objetivo deseado y soñado, a lo largo de veintiocho años. Varias generaciones de planteles, no pudieron lograr antes, la vía de regreso a las rutas argentinas. La Roloneta, lo hizo posible. La versión más completa de un representativo Albirrojo, en varias décadas, lo devolvió al lugar que tanto añoraba. Dejó atrás un larguísimo ciclo de letargo, en la Primera B, y hasta su durísimo estadio en la Primera C. Ganó una Temporada, con solvencia y eficacia, como reflejan en números extraordinarios de este Ascenso.

Las estadísticas, merecen otro apartado, en esta campaña. Solo remarcar, que el equipo de Martín Rolón se subió al podio como Campeón, luego de cosechar diecisiete triunfos; once empates; y seis derrotas, contabilizando los dos partidos de las Finales por el Primer Ascenso Directo; es decir, que cosechó un sesenta y un por ciento de los puntos, con sesenta y dos puntos sobre ciento dos unidades disputadas. Lautaro Ezequiel Villegas, se trepó al primer puesto de la Tabla de Goleadores, con sus trece conquistas, incluyendo esta última perla, que se repetirá por lo siglos de los siglos.

Esencialmente, quedará reflejada por siempre, la tarea inconmensurable de Damián Ezequiel Tello y toda la estructura defensiva del equipo, que cerró esta inolvidable zaga final, acumulando más de ocho partidos sin recibir un gol, con un invicto de ochocientos dos minutos sin tantos en contra; y un total de veintiún partidos, en la sumatoria general de Temporada, sin haber recibido una perla en contra. Consistentemente, entre aquel gol de Ezequiel Melillo, a los cuarenta y uno minutos del primer tiempo ante el mismísimo San Miguel, también en Los Polvorines, por la 5° fecha del Torneo Clausura; y esta segunda Final, que lo propulsa como Campeón de la Primera B, en mil doscientos diecinueve minutos, solamente Sebastián Vivas -el otro goleador del certamen-, logró anotarle una conversión, en más de trece encuentros. ¡Sensacional!

Martín Rolón, el artífice de esta enorme remontada, ingresó en la galería de los grandes Entrenadores de la institución. Junto a sus Ayudantes Mauro Marrone y Federico Patiño; el Preparador Físico Fernando Guarracino, y todo su Cuerpo Técnico, partiendo de su trabajo en Divisiones Juveniles y a partir de la emergencia ante el fracaso de otro Entrenador, han rediseñado esta Maravilla. La Máquina de Ser Feliz. Como lo visualizó, el mismo Técnico. “Hay buen material, tenemos con qué…”, afirmaba Martín Rolón a Frecuencia Albirroja -fuera de micrófono-, el Domingo de Ramos, antes de su debut formal. Tomó un conjunto, que tras la 7° primeras fecha del Torneo Apertura, estaba a tres puntos del último de la Tabla y el descenso, y terminó logrando la consagración máxima. Sustentada en el trabajo; el análisis; la interpretación precisa; la simpleza para explicarlo; una forma de juego con características propias para su elenco, con finas adaptaciones para cada compromiso; la audacia, para ir a buscarlo, cuando había que arriesgar; la firmeza, para alterar el libreto y aguantar la parada, como en esta última estación; y fundamentalmente, su sencillez y conocimiento del universo Albirrojo, para conectarse con cada actor que participó en este proceso. El liderazgo de Martín Rolón, un elemento vital, en la reconstrucción de esta historia.  

Los futbolistas; el Cuerpo Técnico; Auxiliares; miembros del Consejo de Fútbol y Comisión Directiva, regresaron a Remedios de Escalada, galvanizados de honor, por haber cumplido la misión y efectivamente, completar el operativo retorno a la Primera Nacional. Fueron recibidos por una multitud, con los galardones merecidos, de una conquista que contagió de felicidad y orgullo, a varias generaciones de hinchas y otros, que se abrazaron a partir de este triunfo, a la locura de ser hinchas de Talleres.

¡Talleres declaró su victoria y volvió a ser Nacional! ¡Felicidades, Campeón!


SISTESIS:

SAN MIGUEL 0

Joaquín Pucheta; Iván Regules (95’ Gerardo Alegre Rojas), Francisco Manenti (81’ Cristian Chávez), Dixon Rentería, Rodrigo Díaz y Peter Martínez Grance; David Muller (69’ Matías Rojas) y Federico Sena (69’ Nahuel Sica); Jorge Ferrero (82’ Pablo Ortega), Álvaro López y Ezequiel Melillo.

Suplentes: Alan González y Rodrigo Chao.

DT: Gustavo Coleoni.

TALLERES 1

Damián Tello; Fernando Duré, Nicolás Monserrat y Nicolás Malvacio; Ciro Campuzano (60’ Agustín Campana), Norberto Palmieri, Alejandro Benítez (86’ Franco Zicarelli) y Patricio Romero (68’ Luciano Arcuri); Fernando Enrique; Lautaro Villegas y Rodrigo Cao (86’ Dylan Vergara).

Suplentes: Mauro Casoli, Sebastián Gallardo y Diogo Guzmán.

DT: Martín Rolón.

Gol: 80’ Lautaro Villegas (T).

Amonestados: David Muller y Jorge Ferrero (SM); Nicolás Malvacio, Rodrigo Cao, Agustín Campana y Fernando Enrique (T).

Expulsado: 35’ Martín Rolón (DT) (T).

Estadio: San Miguel (Bien).

Árbitro: Javier Delbarba (Bien).

Asistentes: Ramón Ortiz y Diego Romero.

Cuarto Árbitro: Damián Rubino.

Recaudación: No fue suministrada.

Público: 12000 personas aproximadamente.


 

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 78

 Foto Mono Gómez. Lautaro Villegas se acomoda ante la marca de Francisco Manenti, para convertir.

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 82

  Foto Mono Gómez. El Goleador, Lautaro Villegas, retrata la fuerza de su equipo.

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 00

  Foto Mono Gómez. Ante la adversidad, el Albirrojo se agrandó, y se trajo el Ascenso.

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 70 

  Foto Mono Gómez. Fernando Enirque, fue una pieza fundamental, a la hora de resolver el partido.

vs San Miguel 2º Final Ascenso Directo 2023 84

  Foto Mono Gómez.  Antes del final, Lautaro Villegas tuvo esta, para aumentar la cuenta y no puedo.