Talleres derrotó 2 – 1 a Argentino de Quilmes en la Barranca, y se prendió con 51 puntos otra vez, en el lote de los que jugarían el torneo reducido, para disputar el segundo ascenso. El Albirrojo jugó mejor, consiguió los goles en momentos claves, y sufrió demasiado hasta el final, pudiéndolo haber liquidado y goleado, ante un rival tuvo dos expulsados en el primer tiempo, que lo condicionaron tempranamente. El Mate tuvo un penal y lo erró; y el árbitro Gastón Iglesias fue acusado por los locales, de haberlos perjudicado con su actuación. 

Gentileza Gus Holandés- El Albirrojo volvió a sonreir. Ganó por tercera vez de visitante.

En un partido polémico, caliente y atípico, Talleres se llevó una buena victoria, para prenderse otra vez en puestos de reducido y decir presente. Si bien tuvo la oportunidad de engrosar su diferencia de gol debido a las circunstancias, y no lo pudo hacer, el triunfo es clave  para encarar los cuatro compromisos que restan para el final del campeonato.

Desde muy tempranito, ya se respiraba un aire extraño en la Barranca Quilmeña. El clima estaba algo revuelto, y los locales expresaban su disconformidad con la designación de Gastón Iglesias, quien ya había dirigido Talleres – Argentino de Quilmes en la ronda anterior, en la 15° fecha, en lo que fue victoria del Albirrojo por 3 – 0, con dos hombres de más.

El comienzo del partido fue bastante parejo, y Talleres mostró desequilibrio por el costado derecho. Pero los escándalos comenzaron temprano, y a los quince, luego de una infracción de Maxi Rodríguez que desembocó en su quinta amarilla, Alberto Pascutti fue a recriminarle algo a Oscar Santángelo al banco local, hecho que desembocó en un tumulto importante, con trompadas incluídas. Ambos Directores Técnicos resultaron expulsados.

Y a los dieciocho llegaría la apertura del marcador para el Albirrojo, tras una triangulación entre Abel Flegenal, Nicolás Gentinetta y Maximiliano Rodríguez que, recibiendo un exquisito taco del último, cruzó un fuerte derechazo cruzado y puso en ventaja a la visita.

A partir de allí, el dominio de Talleres se acentuó, y con Maximiliano Rodríguez en un nivel muy alto, siguió incomodando a Argentino de Quilmes, cuyos jugadores ya se mostraban exaltados por demás.

Y tal así era que, a los treinta, Pablo Pérez iba a ver la roja por aplicarle  un codazo a Nicolás Gentinetta. Esto produjo el estallido de la platea local.

Pero cinco minutos después, las cosas para el local se iban a desmadrar aún más, porque Nahuél Arias le propinaría un planchazo y un manotazo a Alejandro Orfila y para variar, también se iba al vestuario temprano. Si la platea había estallado unos minutos antes, lo que ocurría en ese momento ya rozaba el escándalo.

En esos diez minutos que faltaban para que finalice la primera etapa, con Talleres con dos hombres de más, se vio lo mejor del Albirrojo, que tuvo cuatro oportunidades para liquidar el pleito y no las pudo resolver.

En la segunda mitad, los de Oscar Santángelo salieron mejor parados, organizados con esos escasos nueve hombres, y complicaron, sobre todo en los primero minutos, a Talleres. Cristian Tello y Diego Leguiza, con embates individuales, inquietaron a la defensa visitante.

Justo en ese momento, luego de una mala entrega de Mario Gallardo y una distracción defensiva, Juan De La Fuente terminó cometiéndole penal a Cristian Tello. Pero el arquero, Adrián Leguizamón, desvió un remate por el palo izquierdo del arquero y desperdició una chance única.

Y Talleres no lo perdonó, porque Gustavo Britos, recién ingresado, realizó una corrida por la derecha y habilitó a Abel Flegenal, quien colocó el balón pegado al segundo palo y amplió la ventaja, para poner el 2 - 0, en dieciocho de complemento.

Luego del gol, otra vez era Talleres el que manejaba las acciones, poniendo la pelota en el piso y teniéndola, con Mariano Campodónico y Abel Flegenal como abanderados, para aprovechar alguna corrida de Gustavo Britos. Pero ni Gustavo Britos ni Abel Flegenal estuvieron finos a la hora de marcar el tercero.

Y Matías Correa a los veintidos, de cabeza puso el 1 – 2, que dejaba con vida al remendado numéricamente Argentino de Quilmes.

Aprovechando la envión anímica, el local fue a buscar el empate con mucho corazón, y estuvo cerca de lograrlo. Porque Juan De La Fuente sacó del ángulo un cabezazo que se metía, y pudo haber sido el empate.

De contra, Talleres tuvo una infinidad de situaciones para liquida las cosas, pero Gustavo Britos, que las generaba, no las resolvía, y tampoco Abel Flegenal.

Faltando un minuto, el local tuvo la última, cuando Diego Leguiza falló un disparo casi desde el área chica.

Finalmente fue victoria de Talleres, más costosa de lo que se hubiera esperado dadas las circunstancias, y que podría haber sido más abultada para evitar los sustos en el final. Pero ganó bien, y sigue prendido en la lucha por ingresar al G-4.

SÍNTESIS

ARGENTINO DE QUILMES 1

Adrían Leguizamón; Pablo Pérez, Matías Correa, Carlos Ojeda y Leonel Rojas (75’Sergio Tejjera); Nahuel Arias, Adan Ingenthron, Walter Hermoso (51’Jonathan Da Luz) y Cristian Tello; Diego Leguiza y Hernán Centurión (45’ Juan Horvat).

Suplentes: Brian Delgado, Matías Polack, Ever Molina Ríos y  Héctor Amarilla.

D.T: Oscar Santángelo.

TALLERES 2

Juan De La Fuente; Enzo Baglivo, Gustavo Campuzano y Leonardo Aguirre; Maximiliano Rodríguez, Mario Gallardo, Alejandro Orfila y Leandro Scornaienchi (90’Alan Mareco); Abel Flegenal; Nicolás Gentinetta (61’ Gustavo Britos) y Mariano Campodónico (80’ Yoel Arce).

Suplentes: Alejandro Granero, Sebastián Rodrigo, Alan Matijasevic y Juan Silva.

D.T: Alberto Pascutti.

Goles:18’ Maximiliano Rodríguez (T), 62’ Abel Flegenal (T); 67’ Matías Corre (AQ).

Árbitro: Gastón Iglesias (Bueno).

Expulsados: 14’ EAlberto Pascutti (T) y Oscar Santángelo (AQ); 30’ Pablo Pérez y 36’ Nahuel Arias (AQ).

Incidencias: 52' Adrián Leguizamón erró un penal.

Amonestados: Maximiliano Rodríguez, Mario Gallardo y Juan De La Fuente (T) Leonel Rojas (AQ).

Asistentes: Luis Castillo y Matías Basso.

Estadio: Argentino de Quilmes (Malo).

Público: 1.200 personas aproximadamente.